Numerosos estudios han puesto fin a la creencia de que el buen estado físico es sinónimo de envejecimiento óptimo. Los resultados de los trabajos llevados a cabo muestran que una actitud positiva ante la vida proporciona mayor felicidad en la vejez que el propio estado de salud, resaltando que el optimismo y la actitud de hacer frente a las cosas son importantes para conseguir un envejecimiento feliz.
Nuestra experiencia al trabajar día a día con personas mayores también nos demuestra que, efectivamente, el estado físico no determina su felicidad pero sí lo hace una actitud positiva para hacer frente a las limitaciones y/o dificultades.
Según los expertos, estos serían algunos de los tips para que los adultos mayores se mantengan felices:
- Aceptar la propia realidad y seguir adelante desde ese lugar
- No establecer comparaciones con lo que hacíamos cuando éramos de jóvenes
- Enfocar en lo que se puede hacer, no en lo que no se puede
- Priorizar las cosas que son realmente importantes
- No tener miedo de pedir ayuda
- Planificar el día para maximizar la energía
- Permanecer conectado con amigos y familia
- Ser proactivo y abogar por la propia salud
- Continuar haciendo ejercicio (aunque sea sentados)
- Ser agradecidos por las pequeñas cosas
- Tener un propósito en la vida
- Encontrar la forma, aunque sea pequeña, de ayudar a otros.
Pero la felicidad y la satisfacción personal de los adultos también dependen de sus contactos sociales. No se trata solo de tener muchas relaciones o amistades, sino que lo importante es la calidad de esa relación. En este sentido, son muchas las investigaciones que han concluido que las buenas relaciones protegen nuestra salud física y mental.
Por todo lo dicho anteriormente, desde nuestro centro DomusVi Azalea, desarrollamos intervenciones dirigidas a la promoción del bienestar subjetivo de nuestros mayores, que fomenten el cuidado y cultivo de actitudes positivas con actividades que los mantengan activos y motivados y que refuercen sus relaciones sociales. De esta manera, contribuimos a poner nuestro granito de arena para que alcancen su felicidad.
Y recuerden: “apuesten por las relaciones humanas saludables y afectivas como fórmula para la felicidad”.