Una de nuestras residentes, ha querido mostrar su agradecimiento a nuestra Trabajadora Social del Centro, con una especial rosa. Ella tuvo un acto de empatía y de comprensión con ella, porque le salió del corazón decirle de llevarla y acompañarla a la habitación del hospital, donde se encontraba su esposo. Ella lloraba todos los días con la impotencia de no poder verlo, ya que no tienen familia ni amistades aquí , al ser de otro país.