El pasado 19 de Marzo fue el día del Padre y en Domusvi aprovechamos para rememorar y saber el origen de tan importante fecha.
En primer lugar dividimos por grupos para un fomentar la competición positiva. El ejercicio consistía en completar dos actividades lo antes posible y el grupo ganador obtendría un premio. Esto hizo los usuarios se mostrasen entusiasmados e interactuaran entre ellos para conseguir los objetivos.
En el primer ejercicio tuvieron que completar un texto con palabras ya dadas, donde se trabajó la atención dividida y la concentración. La segunda parte consistió en completar unas preguntar acerca del texto que acabañan de completar, esforzándose por recordar lo leído, trabajando de este modo la memoria. Todo ello, fue de manera escrita, fortaleciendo su mecanográfica.
Este tipo de estímulos durante los talleres de Psicología en Domusvi son fundamentales para entrenar nuestra memoria con el fin de prevenir y/o frenar su deterioro.
Cuando finalizaron los ejercicios, todos fueron ganadores y a todos se les obsequió con el premio prometido, lo que promovió el compañerismo entre ellos. Todos quedaron muy contentos y complacidos.
Finalizamos el taller, realizamos un ejercicio de reminiscencia donde cual había sido el regalo más bonito que les habían hecho a sus padres, las respuestas fueron muy emotivas, la mejor fue cuando una residente dijo que el mejor regalo que le había hecho a su padre fue «¡un beso muy fuerte!», reflexionando que los regalos mas importantes no son materiales. Y cuanta razón…
