El pasado viernes, en el Centro DomusVi Carrús, se celebraron los Juegos Olímpicos de Verano que consistieron en tres pruebas, dos de ellas basadas en ejercicios que combinaban habilidades físicas y cognitivas al mismo tiempo. En la primera prueba, los resientes debían responder si la información que se les daba era verdadera o falsa, lanzando el balón a través de dos aros, uno verde (para la respuesta verdadera) y otro rojo (para la respuesta falsa). La segunda prueba consistió en lanzar el máximo número de bolas en 1 minuto a un cesto, por grupo, y la tercera fue un ejercicio de sumas y restas cuyo resultado debía darse lanzando el número de aros equivalente al resultado total.
Durante estas olimpiadas si bien los residentes disfrutaron y se divirtieron, también reforzaron a la par la coordinación óculo-manual, la motricidad gruesa, ejercitaron las habilidades cognitivas implicadas en el cálculo, la comprensión y la lógica, las habilidades de comunicación y la toma de decisiones en equipo.