Bienvenidos al día mundial de enviar una carta a un amigo!
En esta ocasión, queriendo dar un punto de originalidad, hemos fomentado la escritura de cartas de nuestros residentes en las que han dado rienda suelta a la pluma para describirse a sí mismos en un taller de escritura que fomenta no sólo la mente, sino también la motricidad de las manos.
Después, en otro taller, hemos leído de forma anónima las cartas con el objetivo de que descubrieran quién era el dueño de cada una de ellas, viendo si se conocen tanto como creemos. Os sorprendería saber el grado de acierto y lo bien que se conocen entre ellos tras tanto tiempo de convivencia!
