Como no aprovechar los días en los que el sol, de este verano tan caluroso, nos da una tegua y podemos salir un rato a la acalle y respirar aire fresco; salir nos llena de energía y nos distrae de la rutina del día a día.
La luz solar puede mejorar nuestro estado de ánimo, disminuir la presión arterial, fortalecer nuestros huesos, músculos e incluso nuestro sistema inmunológico. Una breve exposición es suficiente para cosechar todos estos beneficios. El tiempo aconsejado es de 10 a 20 minutos en verano y 1 hora y media en invierno para alcanzar la síntesis de vitamina D, que nos ayuda a producir una mayor cantidad de serotonina, que es una de las hormonas encargadas de que nos sintamos más felices.