Que gusto da recibir en casa a buenos amigos y más si son tan cariñosos y amigables como nuestros amigos caninos, cada día están más integrados en nuestras vidas, vienen con ganas de vernos y saludarnos, nos dejan cogerlos y acariciarlos con mucho cariño, y todo hay que decirlo que a nosotros nos pasa lo mismos y tenemos ganas de que que llegue el día de que vuelvan a vernos.