Ya se acerca la Navidad y con ella tradiciones y rincones con encanto. Uno de los lugares emblemáticos de las navidades barcelonesas es, sin duda alguna, la Fira de Santa Llúcia, situada frente a la Catedral de Barcelona, oficialmente, la Catedral de la Santa Cruz y Santa Eulalia.
Pesebres, muérdagos, caganers, tió de Nadal, y muchos más adornos y figuras tradicionales nos ha ofrecido esta magnífica fira a un grupo de usuarios de la residencia DomusVi Bonanova. Cada parada tenía detalles que no podíamos dejar escapar, impregnándonos de ese espíritu navideño que a todos y todas nos hace sonreír.
No podíamos irnos sin antes pasear por las encantadas callejuelas del Barrio Gótico, y como es tradición en esta ciudad, realizamos una parada obligatoria en carrer de Petritxol, concretamente, en la chocolatería-churrería La Pallaresa, con el fin de degustar su especialidad.
Fue una mañana soleada, en la que disfrutamos de un paseo inmejorable, con risas y villancicos que no olvidaremos.
