En un primer lugar, comenzaron por deshacer los bloqueos corporales a través de ejercicios físicos y dinámicas divertidas. Para posteriormente entrenarse con diferentes dinámicas que facilitan la creatividad y refuerzan la comunicación, la escucha activa y la colaboración. Y finalizaron la jornada aplicando lo aprendido con diversos ejercicios de creación de historias.
Como bien explican los actores de Jamming: «La idea del curso de iniciación es aprender dos sencillas palabras: “sí”, “y además”. Sí a lo que el otro me propone, y además le añado este otro granito de arena respetando su propuesta. Por tanto, aprendemos con varias técnicas para aceptar y trabajar en equipo».
Y esto fue lo que se trabajó en la jornada tan divertida que pudieron pasar nuestros profesionales, todos ellos agradecidos por la novedad del taller.