Ayer jueves estuvimos jugando a la Brisca, recordando las normas, las señas, cuántas cartas quitar si somos 3 jugadores… en definitiva, pasando un rato agradable y divertido.
Los juegos de mesa estimulan la percepción sensorial, nos ayudan a romper nuestra rutina y son un recurso para entrenar nuestras habilidades comunicativas y cognitivas. Así, fomentamos la comunicación entre los residentes y facilitamos el contacto social.