En la mañana de ayer , los residentes que conviven en la quinta planta , disfrutaron de una divertida terapia en la que se trabajaron tanto el área física como cognitiva.
Una terapia grupal que nos recordaba los viejos tiempos cuando la maestra nos sacaba a la pizarra.
Más de una de nuestras residentes se encontraba como pez en el agua con el rotulador en mano en el rol de profesora.