Una de las celebraciones navideñas locales, en la zona del Alto Aragón, es la llamada tronca de Navidad. Es una tradición de los pueblos aragoneses desde mucho tiempo atrás, pero ha ido cayendo en el olvido, por eso en los últimos años se está intentando recuperar.
Con la llegada de la Navidad y el frío, las familias solían reunir troncos y guardarlos en el hogar para calentarse en la fría noche navideña. Parte de la celebración consistía en elegir el mejor tronco y la noche de Nochebuena se bendecía para motivar los tiempos de fortuna en el año que estaba por llegar y se solía cubrir con un manto en el que se escondían golosinas para los pequeños de la casa.
En DomusVi Fontibre queremos sumarnos a la recuperación de esta bonita tradición aragonesa, por eso este año hemos preparado nuestra particular chimenea con su tronca, para que traiga dulces a nuestros residentes.
Los asistentes han disfrutado mucho y les ha gustado conocer esta tradición tan bonita.
¡Feliz Navidad!