Aplicación de las nuevas tecnologías para personas mayores en centros residenciales
En las dos últimas décadas, y más concretamente en los últimos cinco o diez años, las nuevas tecnologías se han ido asentando en los centros residenciales. Ha sido un cambio gradual y paulatino, más lento que en otros ámbitos de la sociedad debido a la brecha digital relacionada con la edad, que ha dificultado su penetración en este colectivo, pero que ha llegado para quedarse. Hoy en día el desarrollo tecnológico es tal que muchas de las actividades cotidianas son posibles gracias a su uso, y en el año de la pandemia se han demostrado más necesarias y útiles que nunca.
Pero, ¿cómo pueden ayudar las nuevas tecnologías a las personas que viven en nuestros centros?
La tecnología, al servicio de las personas mayores, aporta un sinfín de soluciones a sus necesidades. Pueden ayudar en diversas áreas, como por ejemplo, en la salud, en el ocio o en las relaciones sociales, y pueden abordarse utilizando dos perspectivas: como personas usuarias activas, que las utilizan para hacer tareas de todo tipo, como el resto de la población (ocio, formación, gestiones administrativas…), son motivadoras y con propiedades lúdicas, o como personas usuarias perceptoras de servicios de apoyo a su vida diaria, para la mejora de la calidad de vida, la autonomía y la seguridad de las personas mayores.
Algunos ejemplos de tecnología para los mayores que utilizamos en la residencia
En los últimos años nos hemos ido adaptando a esta nueva realidad y nos hemos ido abasteciendo de aparatos electrónicos y sistemas avanzados de control que nos han permitido reforzar estos aspectos señalados, fomentar la actividad y la autonomía de nuestros usuarios y procurarles unos cuidados más seguros.
Así, por ejemplo, durante los meses de la pandemia, gracias a la telefonía móvil y las videollamadas los residentes pudieron mantener un contacto regular con sus familiares y seres queridos y se pudo amortiguar el efecto devastador de la cancelación de las visitas presenciales. Si bien es cierto que dicha situación era imprevisible, ha puesto de manifiesto la importancia de seguir dotándonos de herramientas que faciliten las relaciones sociales a distancia.
Desde un punto de vista más estrictamente terapéutico, el uso de las nuevas tecnologías se ha convertido en parte de nuestro día a día en la realización de actividades cognitivas y lúdicas. Por ejemplo, contamos desde hace años con una pizarra digital en la que podemos proyectar contenido interactivo (ejercicios de estimulación cognitiva, videos musicales, etc.) para facilitar la realización de actividades a personas con déficits físicos o sensoriales (visuales o auditivos).
También disponemos de dos ordenadores de sobremesa, un ordenador portátil con función táctil y dos tablets para trabajar de manera individualizada con el nuevo programa de telerehabilitación cognitiva personalizada Guttmann NeuroPersonalTrainer® (GNPT®). Se trata de una plataforma online que busca a través de las nuevas tecnologías ofrecer tratamientos personalizados eficaces y eficientes para pacientes cognitivamente preservados o que han sufrido alguna afectación neurológica. Para ello, en primer lugar, se realiza una exploración neuropsicológica para establecer el perfil inicial de afectación cognitiva y elaborar un tratamiento personalizado y, en segundo lugar, se pauta el tratamiento para que el paciente trabaje supervisado o en su habitación con total flexibilidad de acceso y horarios.
En el último año además hemos adquirido unas gafas de realidad virtual Oculus que nos permiten, a través de la plataforma OROI, recrear ambientes estimulantes mediante terapias inmersivas que dan la sensación de estar en ese lugar. En esta plataforma hay una amplia cantidad de vídeos divididos en diferentes temáticas: lugares, lugares internacionales, artes musicales y escénicas, museos y visitas, mundo rural y experiencias. Este contenido específico para las personas mayores, pretende darles la posibilidad de vivir experiencias nuevas, volver a lugares en los que estuvieron en un pasado o revivir situaciones de su juventud. Todo esto con el objetivo de promover el bienestar, entretenimiento y relajación de los usuarios.
Para la mejora de la salud y la seguridad nos hemos abastecido de material con alto valor tecnológico que nos ha permitido, por ejemplo, retirar o no poner sujeciones mecánicas, como pulseras de control de errantes, sensores de movimiento, cojines de alarma o camas regulables en altura. También afrontar con mayor eficiencia algunos retos que nos ha traído la pandemia, como el control de temperatura diario a todos los mayores, mediante termómetros electrónicos, o el continuo lavado de manos, mediante dispensadores automáticos.
Beneficios de las nuevas tecnologías en personas mayores
A pesar de que todavía muchas personas mayores se muestran reticentes a usar las nuevas tecnologías, más si cabe si supone el aprendizaje de aparatos electrónicos, también es cierto, que después de haberse animado a probar algo nuevo, al ver que mejora su calidad de vida, algunas de ellas las han incorporado a su rutina diaria. De ahí que queramos señalar los beneficios de las nuevas tecnologías en las personas mayores:
- Les “acerca” a sus seres queridos y enriquece sus relaciones sociales. Antes de la llegada de Internet, las soluciones para hablar con amigos y familiares se reducían a usar el teléfono o escribir cartas. En el primer caso, si se vivía en el extranjero resultaba extremadamente caro, y hablar por carta suponía esperar muchos días antes de saber algo de tu ser querido. Hoy en día, sin embargo, los adultos mayores pueden hablar y ver a sus hijos, nietos, amigos y demás familiares en tiempo real.
- Afianzan su independencia. Hoy en día gracias a internet pueden encontrar respuestas a cualquier duda que tengan.
- Se vuelven más activas. El uso de nuevas tecnologías en adultos mayores hace que ejerciten la mente durante su aprendizaje. Les hace volverse más activos mentalmente y este hecho al mismo tiempo repercute en su estado anímico y condición física.
- Mejora su calidad de vida. Con el paso de los años, hay actividades o tareas que se vuelven más difíciles de hacer. Los aparatos tecnológicos, suplen esa carencia, haciéndolo más fácil y reduciendo el esfuerzo necesario.
- Se sienten realizadas y superan los prejuicios. Cuando una persona mayor es capaz de hacer algo cuando creía que nunca iba a poder, sube su autoestima, supera sus prejuicios e inspira a otras personas a seguir los mismos pasos.
Conclusiones
El uso masivo de la tecnología, al igual que en otros ámbitos de la sociedad, se está imponiendo también en el ámbito residencial. Observamos en los últimos tiempos una paulatina asunción de la tecnología por parte de las personas mayores que antes no se producía, algunas de las personas que ingresan actualmente portan entre sus enseres smartphones, ordenadores portátiles, tablets y auriculares inalámbricos, se comunican con sus familiares y amigos a través de whatssap o Facebook, consultan los diarios digitales a diario y realizan gestiones con la banca online. Todo ello supone asumir nuevos instrumentos en favor de su calidad de vida, una asunción que a buen seguro se reafirmará en el futuro con la llegada de nuevas generaciones de personas mayores.
José Ramón López Ruiz.
Psicólogo – CV09677