En residentes con gran deterioro, la estimulación sensorial es básica. Mediante la música y, en este caso, visionado de imágenes hemos trabajado el lenguaje, memoria, evocación de recuerdos, la relajación y por qué no, el baile. Cada persona es diferente y así son también sus reacciones a la estimulación ofrecida, potenciando las capacidades individuales residuales.
Es otra de las terapias que se realiza en el centro y también muy significativas para los mayores.