Las altas temperaturas del verano, tienen un alto riesgo para la salud y especialmente las personas mayores son las más vulnerables y propensas a sufrir un posible golpe de calor.
La recomendación por parte del equipo de enfermería de nuestro centro para evitar complicaciones, consiste en aumentar la frecuencia de ingesta hídrica y consumir alimentos que contengan gran cantidad de agua, como las verduras o la fruta.
En nuestro centro, DomusVi Ribadumia, se ha implantado un programa de hidratación en el que se refuerza la ingesta hídrica cada hora, teniendo en cuenta las necesidades individuales de cada residente.