¡Sus caras no tienen precio!
Nuestros mayores siguen dando su paseito hasta «El Bolero Café», el bar más cercano a nuestra residencia y donde nos tratan como reyes: Nos ponemos todos juntos, pedimos lo que le apetece a cada uno y ponemos la música que elegimos en televisión, por lo que improvisamos karaokes, recordamos letras e incluso bailamos.
Desde nuestro rincón bloguero, nuestro humilde agradecimiento a los trabajadores por su buen trato y servicio a nuestros mayores. Cada jueves, seguiremos yendo a disfrutar de esta buena experiencia.
Todo sea por seguir viendo esas sonrisas en sus caras el mayor tiempo posible.