Llegó la Semana Santa y con ello, los dulces y comidas más tradicionales de esta época, porque hay festividades que pueden gustar más o menos, pero cuando llega la hora de llevarse algo a la boca… ¡a todos nos encanta esta modalidad de festejo!
En esta ocasión, elaboramos y comimos unos crespells… ¡que estaban para reventar de buenos! Y nos sentimos muy orgullosos del trabajo realizado ya que tenían un sabor espectacular y una textura adaptada a las delicadas boquitas de nuestros mayores.
Os dejamos algunas fotos de ese ratito donde compartimos anécdotas, risas y confidencias entre este grupo tan majo y participativo.