Blog Residencia Arturo Soria – Madrid

Ayer por la tarde, en DomusVi Arandia, pudimos contar la gran Actuación del mago Dandini. Cuando salió del cole, llegó al centro con sus amigos Hector y Enma con muchos nervios, cargado de sus trucos y sobre todo de mucha ilusión. Preparamos todo juntxs, acompañados por la madre del artista y sus tíos y cuando estuvimos ya todxs reunidos comenzó su gran actuación. El sonido no fue muy bueno, la verdad y pedimos disculpas al artista y a los allí presentes y nos comprometemos a ir adaptándonos tecnológicamente ya que cada vez nuestrxs encuentros son más y más variados y el sonido es importante. Pero a pesar de todo, su magia logró hipnotizarnos y pasamos una velada estupenda donde además El Gran Dandini contó con la ayuda de alguna residente y de sus amigos. 
Aprovechamos este post para, dando un sentido a todo lo que intentamos hacer, para reivindicar el valor de los cuidados como uno de los ejes para una sociedad sana. Danel con sus 8 años como habéis comprobado tiene interiorizado que hay que cuidar y que se puede compartir muchas cosas con los mayores a pesar de todo lo que les ocurra, que SIEMPRE, TODAS LAS PERSONAS tenemos un grado de capacitación para hacer y sobre todo para ofrecer a los demás amor y valor y esto que le pasa a Danel y a los dos amiguitos que le acompañaban, así como a vuestrxs niñxs que visitan la resi, no es innato, es fruto de la educación en el valor del cuidado que los padres y la sociedad les damos. La sociedad va a ralentí en esto, marcada por el consumismo, la inmediatez y la individualidad pero si educamos a nuestros pequeños de esta manera conseguiremos una sociedad cuidadora capaz de afrontar todos los retos sociales que llegan con su avance. A veces, alejamos a los niños de las residencias para que no vean, para que no sufran pero ellos, que tienen una mente mucho más abierta que los adultos (mentalidad preclara que decían los clásicos filósofos) , como habéis comprobado hoy, disfrutan con ellos y no debemos negarles ese derecho. 
Fue una tarde llena de magia que terminamos disfrutando de una merienda llena de risas.